No podíamos estar más emocionados cuando desde La Roca Village, el famoso Outlet de marcas de lujo de Barcelona, nos presentó una propuesta para hacer un reportaje fotográfico. La idea era hacer fotografías de moda en lugares famosos y emblemáticos pero no tan conocidos como los recorridos habituales y más masificados como podrían ser la Sagrada Familia, la Pedrera o el Parc Güell, entre otros. Aún y todo, paradas obligatorias en una escapada a la Ciudad Condal.

Nuestro destino fue la Cripta de Antonio Gaudí en la Colonia Güell, una verdadera obra maestra que no todo el mundo conoce. Una joya inacabada de la arquitectura modernista, hasta tal punto que solo se llegó a construir la Cripta, convertida en la actualidad en iglesia. En este lugar podemos ver la esencia de la obra de Antoni Gaudí, O dicho de otro modo, “Gaudí en estado puro”, ya que es aquí donde se sentía libre de hacer y deshacer todas las veces que quisiera las columnas, las paredes, la decoración floral, los forjados de hierro, o incluso los bancos… en fin, todos aquellos detalles que luego acabaría plasmando en la imponente Sagrada Familia.

También tuvimos que escoger un outfit primaveral que encajase en el entorno que teníamos que fotografiar: un vestido largo con vuelo de color azul cian de Pepe Jeans, con estampado en tonos naranjas. Esto nos hizo centrarnos en la combinación de colores complementarios: Azul-Naranja para conseguir esa armonía y movimiento ya que consiguen que se intensifiquen entre sí. Añadimos como complementos un bolso de mano, tipo neceser y unas sandalias de plataforma, ambas en color naranja, todo de Bimba y Lola. Por último, el vestido ya resaltaba por sí solo, con lo que las joyas no fueron necesarias, más que una pulsera de Pandora.

Hicimos fotografías tanto en el exterior, donde el lugar no nos dio mucha abertura en las imágenes porque el recinto se encuentra todo vallado tras las obras de remodelación que están realizando en el suelo y aquellas zonas afectadas por la humedad; como en el interior, un espacio mágico en el que con sólo entrar te impresiona con su elegancia, su acogedora bóveda, sus vidrieras de colores que se abren en forma de mariposa y sus bancos tan característicos. Un lugar muy cálido y con mucho encanto, desconocido para muchos, y que debería ser parada obligatoria para aquellos que visitan la ciudad de Barcelona.

Categorías: Miscelánea

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Colonia Güell, un encargo de La Roca Village

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